¡Y todo por hacer...!

Rodearnos de plantas nos hace más felices. Meter la naturaleza en casa, despejar las ventanas de cortinas para que el paisaje pase dentro, dejar entrar toda la luz natural... son acciones que relajan y mejoran nuestro ánimo. Cualquier elemento de la naturaleza que introduzcamos en nuestro hogar contribuirá a aumentar nuestra felicidad.    

Los mercadillos locales son, muchas veces, los lugares donde mejor se puede encontrar el regalo ideal. Para mí es un gustazo curiosear en los diferentes puestos, rebuscar y hallar algo especial y único. En Icod de los Vinos, cada sábado, hay mercado y, aparte de los puestos de verduras y frutas, de artesanía, de golosinas, de cosmética natural... hay, también, puestos de manualidades como el de "eljardíndelashespérides" en el que puedes adquirir cuadernos muy chulos de papel reciclado. El envoltorio que te ofrecen para llevar tu compra es papel de periódico reutilizado como sobre, algo que le da mayor encanto, pues denota el respeto al medioambiente.

Se aproxima la vuelta a las clases, por lo que es importante convertir nuestro espacio de trabajo y estudio en un rincón que se preste a la concentración, que sea un lugar que nos inspire, en el que haya una buena iluminación- si es natural, mejor-, que esté ordenado, exento de ruidos y que cuente con alguna planta natural. Si le añadimos algún elemento decorativo, que sea algo que nos recuerde buenos momentos (en este caso, elegimos latas de caramelos adquiridas durante un viaje a Madrid y a Zaragoza, y otra de té, regalo de una amiga).